Cansado de los baches de su ciudad, un gomero de la ciudad de Rio de Janeiro, creó un muñeco llamado João Buracão (Juan Agujerote) para transformarse en una especie de controlador de baches.
La capacidad del brasileño de reírse de su propia desgracia, surtió efecto, porque João Buracão fue tapa de diarios y hasta salió en la TV, lo que hizo que rápidamente se tapen los baches de aquella primera calle.
Lo simpático es que el muñeco empezó a reproducirse, y ya habían muchos indicando baches por la ciudad... fue declarado una especie de ciudadano ilustre y hasta fue recibido por el Intendente de la ciudad, como se puede apreciar en la foto:
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